Capítulo 06: Encuentro



No supo exactamente cuánto tiempo pasaron besándose hasta que Carola se separó de él sorpresivamente, poniéndose de pie y dirigéndose a la puerta. Julián la alcanzó justo a tiempo, impidiendo que se fuera.
—¡Pará! ¿Por qué te vas? ¿No te gustó el beso?
—Esto está mal, Julián. Vos estás con Amir. No podés besarme como si estás con él, ¿entendés?
—Estás equivocada, yo no estoy con Amir.
—¿Qué?
—Lo que escuchaste, cortamos. Él resultó ser más… caprichoso, de lo que yo pensaba. Amir no significa nada para mí, yo te quiero a vos.
—No parecía lo mismo cuando estaban juntos —dijo Carola con cierto resentimiento.

—Es en serio. Mientras estuve con él, no pude dejar de pensar en vos nunca. Y cuando se comportó así en el patio, sin querer trabajar, me di cuenta de que definitivamente no era para mí. Está todo bien con él, pero como amigos. Ya lo hablamos y lo entendió. Parece que yo tampoco era su tipo de chico.
—A mí me pasó lo mismo… —confesó ella—. Cuando los veía juntos me moría de celos. Y trataba de convencerme de que era lo mejor para todos, pero no podía dejar de extrañarte.
—¿Entonces eso significa que aceptás volver a ser mi novia?
—No… bah, no sé… significa que lo voy a tener que pensar.
—¿Qué tenés que pensar? Yo te quiero, vos me querés… ¿o no?
—Obvio que sí, pero no es tan fácil. Pasaron muchas cosas en este tiempo, ni siquiera estamos viviendo en Rincón de Luz como antes. ¿Me vas a dar un tiempo a que lo piense?
—Todo el tiempo que necesites con tal de que volvamos a estar juntos —aseguró Julián, tomándola de la mano, y besándola una vez más.


Estrella guió a Úrsula y a Tali por un descampado grandísimo donde habían muchas carpas de circo enormes con diseños a rayas y cientos de casas rodantes. Se habían metido a una capa con rayas azules y blancas. Adentro era tan grande que casi no alcanzaba a verse el otro extremo. Estaba lleno de malabaristas, trapecistas, animales, motocicletas, y muchísimos otros acróbatas. Una música muy alegre sonaba de fondo, y muchos de los acróbatas practicaban sus números al ritmo de esta.
—¡Este lugar es mágico! ¿Cómo decías que se llamaba? —preguntó Úrsula.
—Circo. ¿Nunca habías venido a uno? ¡Es el mejor lugar del mundo! —exclamó Estrella—. Yo siempre vengo acá. Todos me conocen. Hasta a veces trabajo también, tengo mi propio número.
—¿Y qué hacés? ¿Volás como esos pitufos? —Tali señaló con la cabeza a unos hombres azules que saltaban por los aires.
—No. Yo hago malabares y bailo. ¿Quieren que les muestre?
A pesar de que Tali no se vio muy emocionada, Úrsula insistió tanto que Estrella les mostró cómo podía bailar y al mismo tiempo hacer malabares con cuatro pelotitas de colores. La brujita, totalmente sorprendida por lo que veía, la aplaudió con entusiasmo cuando finalizó.
—¡Es increíble! ¿Me podés enseñar a hacer eso?
—¡Obvio! Pero no es fácil. Vas a tener que practicar mucho tiempo.
—No me parece la gran cosa. ¿No podés hacer nada más? —la desafió Tali.
—Bueno —dijo Estrella, mirando a su alrededor—, sí, también puedo montar elefantes. Pero todavía no les enseñé ningún truco.
—¿Montar elefantes? Es como un caballito. Cualquiera puede hacer eso. Me refería a algo más sorprendente.
—¿Por qué no lo intentás vos si es tan fácil? —preguntó Estrella, ya algo irritada.
—Mirá y aprendé, Úrsula. —Tali y sus compañeras del hogar pasaron esquivando a los monos y se acercaron a los elefantes.
—No lo hagas, puede ser peligroso —le advirtió Úrsula.
—Idioteces. Más fácil que la tabla del dos —aseguró Tali, pero por dentro no era tan valiente como aparentaba: los elefantes se veían mucho más pequeños desde lejos. Se agarró del cuerpo de uno, apoyó el pie en una superficie que tenía colgando y, como pudo, logró sentarse encima suyo. —¡Lo hice! ¿Vieron que era re fácil?
Úrsula la miró sorprendida y la aplaudió. Estrella, luego de un momento, la aplaudió también. —Lo hiciste bastante bien para ser una principiante. Felicitaciones.
—¡Gracias, público! ¡Gracias! ¡Soy la mejor domadora de elefantes del mundo! —Tali festejaba alzando sus brazos y agitando sus piernas contra el elefante.
—¡Tali, no! ¡No lo golpees! —le advirtió Estrella.
El elefante, asustado, elevó sus patas delanteras y luego se echó a correr a toda velocidad. Tali ni siquiera podía ver a su alrededor de tan rápido que iba: solo percibía líneas borrosas moviéndose una tras otra.
—¡AHHH! ¡AYUDA! ¡ESTE ELEFANTE SE VOLVIÓ LOCO! ¡QUEDATE QUIERO, ELEFANTE ESTÚPIDO!
Dirigiendo su movimiento como pudo, destruyó toda una plataforma de madera, envistió un set de luces, y tiró abajo varias cortinas. Estaba segura de que ese iba a ser su final: el elefante iba a golpearla contra algo e iba a morir. Esa había sido su corta vida y su trágico y ridículo final: muerta arriba de un elefante en un circo. No era un final digno de ella.
Estaba quejándose de eso cuando notó que alguien saltaba encima del elefante y la llevaba consigo de vuelta hacia el suelo, a toda velocidad. Ambos cayeron sobre un montón de paja que había en el suelo.
—Me salvaste… gracias —agradeció Tali mientras se quitaba la paja del pelo.
—De nada. Tenés que tener más cuidado, podría haber terminado todo mal —dijo el chico. Tali lo miró con mayor detenimiento: era alto, de cabello oscuro rizado, y cuerpo musculoso para su edad.
—Me llamo Tali.
—Yo Rocky. Un gusto. Bueno, me tengo que ir antes de que me vean por acá.
—¡Esperá! Te dejo mi número así nos conocemos… ¿no? Digo, como me salvaste la vida. Te debo una charla o algo. —Tali sacó un papelito, anotó su número tan prolijo como le fue posible, y se lo entregó.
—Gracias, Tali. Me encantaría hablar con una chica tan linda como vos, así que te llamo en la semana. Nos vemos —dijo Rocky, y se despidió dándole un beso en la mejilla.
Estrella y Úrsula llegaron corriendo desesperadas a su lado.
—¡¿Estás bien?!
—¡Pensábamos que te había pasado algo! ¡Te salvaste por un pelo!

—Cállense. Estoy mejor que nunca. Aunque no sé si me morí y me fui al cielo, pero no me importa. Voy a tener una cita con el chico más lindo del mundo.

1 comentario:

  1. wooooow!
    este capítulo estuvo lleno de romance!!
    Me encanta la forma en que se conocen Taly y Rocky

    ResponderEliminar

¿Qué es "Buscá la luz"?


"Buscá la luz" es una historia llena de magia, amistad, amor, y solidaridad.

En ella tanto adultos como chicos aprenden a lidiar juntos con los problemas diarios y terminan por entender que el secreto para una mejor vida se esconde en el niño que cada uno de ellos lleva dentro.

Basada en la exitosa telenovela "Rincón de Luz", una idea original de Cris Morena.

Escrito por Fundador

Twitter

Soñamos juntos con:



Soñamos juntos con:


PLL Arg

Ediciones Frutilla

Una nueva aventura comienza

Letra por letra

Seamos aliados



Seamos aliados


Busca la Luz